¿Por qué te autosaboteas?
Hace algún tiempo platiqué con una persona que me decía: yo sé que debo comer más sano, tengo todas las recetas saludables y cuando voy al supermercado compro todas la verduras para cocinarlas. Pero cuando llega el momento de preparar cada comida, no me siento con ganas de hacerlo porque siento que en el fondo no me lo merezco.
Esto es de lo más común en las personas, yo he estado ahí muchas veces.
Donde sabes perfectamente bien lo que te conviene pero estás tan cansado, sintiendo tanto dolor o tan triste que mejor compramos algo que nos hace sentir bien un minuto como la comida chatarra, esa que te da felicidad por un momento.
Piensa en esto: ¿cómo cambiaría tu trato hacia a tí si fueras tu propio hijo? Vayamos un poco más profundo, si tienes hijos, sobrinos o una mascota estoy casi seguro que los tratas mejor que a tí, estás pendiente de sus comidas, de darle sus medicinas y cuando se enferman los llevas al mejor doctor que puedes pagar.
Te propongo este ejercicio: Analiza 3 aspectos de tu vida a través de esta nueva perspectiva, imaginando que eres tu propio hijo. Y define que podrías hacer mejor para cuidarte, tal vez necesitas darte más tiempo para descansar, a lo mejor tu cuerpo requiere más ejercicio o quisieras compartir más tiempo con tu familia.